La Fría (Prensa DiócesisSC).- El Presbiterio de la Diócesis de San Cristóbal celebró en el día hoy, sábado, la Misa Crismal donde se reunieron todos los sacerdotes que hacen vida pastoral en el Táchira junto a Mons. Mario Moronta para renovar sus compromisos sacerdotales. La celebración se llevó a cabo en la parroquia Santísima Trinidad, de la Fría.
En la eucaristía se hicieron presentes delegaciones de las ochenta y seis parroquias de la diócesis, quienes manifestaron un gran aprecio a los sacerdotes y quienes también se comprometieron en nombre de todos los fieles del Táchira en el sustento espiritual necesario a los sacerdotes con sus oración por el aumento de las vocaciones sacerdotales y por la santificación del clero.
Mons. Mario Moronta ofreció en su homilía el proyecto de vida del sacerdote, que primero debe tener en cuenta la “conciencia de lo que va realizar… se trata de los misterios de la fe, que le toca realizar ministerialmente, pero en los que ha caminado a lo largo de su vida”. En segundo lugar que “el sacerdote debe ser un testigo de fe… (y) la clave para serlo está en la imitación de lo que tiene entre manos: al mismo Señor”. Y por último en el sacerdote se debe encontrar la cualidad de “su configuración a Cristo Sumo y Eterno Sacerdote”, dijo Monseñor Moronta.
De igual manera el Obispo de San Cristóbal exhortó a los sacerdotes a mostrarse como hombres de fe, “una fe que crece, una fe en la que debemos hallar la fuerza para cumplir nuestra obligación sacerdotal, una fe que se centra en el mismo señor al cual nos configuramos”, señaló Mons. Moronta. Y les invitó a ser un espectáculo de la presencia de Dios, “Por ser hombres de fe, enraizados en el evangelio, seamos el ‘espectáculo’ maravilloso de la presencia de Dios en nosotros y para los demás”.
En la ceremonia también se realizó la bendición y consagración de los santos oleos, entre ellos: el Óleo de los Catecúmenos que a lo bautizados da vigor, pues reciben la fuerza divina del Espíritu Santo; el Óleo de los Enfermos que remedia las dolencias de alma y cuerpo de los enfermos; y el Santo Crisma que es óleo perfumado que representa al Espíritu Santo, y que es administrado con sus carismas el día de bautizo, la confirmación, y en la ordenación de los diáconos, sacerdotes y obispos. Y al final de la celebración Mons. Mario Moronta anunció que la Misa Crismal del año 2010 será en la parroquia San Miguel Arcángel de Abejales.