Coloncito (Prensa DiócesisSC).- Ayer la Diócesis de San Cristóbal se llenó de júbilo por la ordenación Sacerdotal de los jóvenes, Andrés Duarte y Javier Arismendi, y Diaconal de Oscar Fuenmayor. La celebración se llevo a cabo en la parroquia San Pablo Apóstol, de Coloncito, y fue presidida por Mons. Mario Moronta.
El Obispo de Táchira, Mons. Moronta, en su predicación señaló las tareas apasionadas y comprometedoras de un sacerdote. “Encontramos una de las tareas más apasionantes y comprometedoras de todo aquel que recibe el orden sacerdotal en sus diversos grados: anunciar la salvación y ayudar a los creyentes a vivir la transformación que les da el mismo Señor por el bautismo” dijo el Obispo.
Empleando la imagen del Profeta Jeremías, también les recordó que “son alfareros que van modelando la imagen de Dios Padre en los corazones de cada de ellos, van llenando del tesoro del Espíritu las vasijas de barro de sus propias vidas y van convirtiéndose en ofrendas viva que se presentan continuamente a Dios”.
“Cada Sacerdote, como cada Diácono, - dijo Mons. Moronta - está llamado a ser un ministro del Señor para el pueblo de Dios... el Señor Jesús los llama y los marca con la fuerza de su Espíritu para que se conviertan en sus cooperadores y presenten esas ofrendas a Dios Padre”.
Finalizó el Obispo señalando el significado de la postración de los ministros en el rito de la Ordenación Sacerdotal, “se postrarán rostro en tierra para dejarse llenar por la fuerza del Espíritu y levantarse convertidos en servidores del pueblo de Dios a imagen del Pastor bueno”.